Seguir pensándote sin pensar,
Sin pensar... sin quererlo,
Llegas a un lugar, uno de tantos, pero un poco más especial, un poco más especial, porque fui con alguien una vez, otro alguien, otra persona. Pedís unas cervezas, y piensas, nada igual, nada cambie, pero es diferente, con él, no pedí unas cervezas, sino un té.
Tenes un espacio de tiempo lo suficientemente largo [...]
Cómo para que te dé tiempo a pensar... y mires ésa mesa, la que ocupaste con esa otra persona, y lo vacía que quedó, y los recuerdos que quedaron ahí, y las risa, los nervios, los sueños, las esperanzas...
Acabó la espera,
Y vuelve esa comodidad de compartir un ratito de tu vida, con esa amiga a la que le confías todo, a la que le hace daños que hable de tí.
Por eso ya no hablo, por eso duermes... placentera e incesantemente, duermes sobre los recuerdos, esos que en instantes se acomodan en mi pecho y me hacen perder el confort, me hacen sentirte tan lejos y tan cerca a la vez.
Y despiertas de ese sueño, en el que... te dices que ya está bien.
Y que todo va bien....
Y "Qué bien"
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