Vivo en un botón, pequeño, pequeñito.
Cada día, vivo en uno de diferente color y forma, un botón con distintos aromas, un botón con amigos... y otro botón, en el que solamente estoy yo.
En otro mi alma y en otro mi corazón; en otro botón hay esperanzas, deseos, sueños, humildad, ilusiones…
¿Cómo una cosa tan pequeñita, puede llegar a ser enormemente grande?
Todos pequeñitos… sí, y todos unidos... forman un gran conjunto… En este mundo, que he creado, tan solo para mí… vivo yo… Cada día, escojo un botón, y pienso a quién puedo hacerle tan preciado regalo… un botón distinto al resto… Y a quién se lo regale… ¿sabrá apreciarlo? ¿Sabrá proteger, cuidarlo y mimarlo? Yo te regalo, mi mundo, mi botón, lleno de flores y regado con agua de amor… para que aprendas a cuidarlo, mimarlo y protegerlo, como tu propio corazón.
No le hagas al mío, lo que no pretendas hacerle al tuyo… Si tú te proteges, protege también el mío, recuerda, que te regalé mi mundo.
Si lloras en el tuyo, llora también en el mío, pues yo intentaré consolarte…
En definitiva, te entrego todo, pues cuenta con mi mundo siempre y cuando desees.
No hay comentarios:
Publicar un comentario